Con la intervención de 300 granaderos, el Gobierno del DF tomó ayer el control de 50 predios de la Colonia La Malinche, los cuales fueron expropiados para la construcción de la Supervía Poniente y que permanecían resguardados por un grupo de opositores a la obra. En tanto, una veintena de obreros, con mazo en mano, retomó la demolición de casas que estaba suspendida, vigilados por policías.
Luego de recibir los reclamos de los vecinos, Aboitiz y Lucatero se retiraron, mientras que los uniformados cercaron la parte de la colonia donde se ubican 50 de los 126 inmuebles que fueron expropiados para la construcción de la Supervía en las delegaciones Magdalena Contreras y Álvaro Obregón.
La construcción de la Supervía, vialidad de cuota que conectará Santa Fe con Luis Cabrera, avanza entre obstáculos. En mayo de 2010 se completa el pago por los 126 predios expropiados en Magdalena Contreras y Álvaro Obregón para la construcción de la Supervía Poniente. El 15 de julio comenzó la demolición de casas en la Colonia La Malinche, pero los inmuebles se dejaron semidestruidos.
El 26 de julio incursionó al lugar maquinaria pesada del consorcio constructor, pero generó molestias y daños a viviendas de habitantes cercanos, la CDHDF llamó por mejorar las condiciones de la obra. Las labores pararon ese mismo día. El 30 de octubre, en puente por Día de Muertos, irrumpieron 300 granaderos con la intención de levantar el plantón, sin embargo, ante la llegada de más vecinos, se canceló la operación. Inician obras sólo en Luis Cabrera.
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