NOTICIAS

El Senado trabaja… para el Senado

Pese al gasto millonario y la presión de los coordinadores parlamentarios, la nueva sede del Senado no podrá ser inaugurada el próximo 20 de noviembre. Es tal el retraso que presentan las obras, que ni siquiera ha quedado terminado el salón de sesiones. Ayer por la mañana, de traje y corbata, los coordinadores parlamentarios caminaron entre andamios, clavos, mezcla, varillas, cables y plásticos, cuando acudieron a supervisar el avance de los trabajos. Arribaron a primera hora a la zona de obra, donde visitaron el salón de plenos y el área de oficinas de los senadores, que también está inconclusa.

Ahí recibieron una explicación de los representantes de la empresa GAMI, quienes aseguraron que sólo podrán habilitar el salón de sesiones en los próximos 10 días, pues el resto de las instalaciones tienen un rezago de 20 por ciento, en promedio.

El interior del futuro pleno, que es la parte más avanzada de la obra, luce prácticamente vacío: sólo han instalado los escaños -cubiertos con plástico para protegerlos del polvo-, y el resto permanece en obra negra, sin revestimientos ni acabados.

Ver más de la nota