La principal obra de la anterior administración municipal de Querétaro, el Centro de Congresos y Convenciones, requirió de una inversión de 417 millones 608 mil 211 pesos con 37 centavos… pero no se terminó de construir. El gobierno capitalino de Querétaro en el trienio 2006-2009 se comprometió a concluir la referida obra antes de terminar su gestión; esto es, a más tardar en septiembre de 2009, para lo cual firmó y pagó 47 contratos de obra pública y tres de adquisiciones.
Sin embargo, en marzo pasado, la obra estaba a 70% de su construcción, por lo que no se cumplió el compromiso plasmado en el Plan Municipal de Desarrollo 2006-2009. A la fecha sigue sin concluirse. Una veintena de irregularidades en su planeación impidió que la obra se terminara, explicó la Entidad Superior de Fiscalización (ESF) en un informe entregado a los diputados de la 56 Legislatura local.
Estas deficiencias, dice la ESF, se debieron «a que no se contó con los proyectos de ingeniería necesarios en la etapa de planeación y previo a la ejecución de las obras, como se establece en la legislación aplicable, aun cuando se pagó la realización y dirección de un proyecto, ya que éste no contó con las definiciones para ser ejecutado». Personal de la entidad de fiscalización, junto con representantes del gobierno municipal, supervisó la obra del Centro de Congresos y Convenciones de Querétaro en los meses de febrero y marzo de 2010, «constatándose que la obra cuenta sólo con un avance de 70%».
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