Entre el cierre de operaciones de la refinería 18 de Marzo y la conclusión oficial de la limpieza del predio en el que se asentara en Azcapotzalco pasaron 19 años y tres meses.
Luego de 45 años bajo administración de Petróleos Mexicanos (Pemex), la refinería, principal fuente de combustibles para el Valle de México, fue cerrada por el entonces Presidente Carlos Salinas de Gortari, en respuesta a señalamientos sobre los elevados niveles de contaminación atmosférica que generaba.
En el predio ocupado por la refinería quedaron, sin embargo, toneladas de gasolina, diesel, benceno y otros hidrocarburos impregnados en el suelo e incluso en el acuífero de la zona.
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