Mediante la inhibición de la proteína SPAK, María Chávez Canales, científica del Instituto de Investigaciones Biomédicas (IIBm) de la UNAM, logró detener en laboratorio la retención de sal en los riñones y la hipertensión arterial, una de las enfermedades más frecuentes y graves de nuestro tiempo.
Esta proteína, explicó, se expresa en todos los tejidos, tiene efectos sobre la regulación de la hipertensión arterial, y sus efectos se presentan al regular cuánta sal orinamos o retenemos. Si se elimina la actividad de SPAK, se previene la retención de sal en los riñones y esto tiene consecuencias sobre la presión arterial. “Si excretamos más sal de lo normal, mantendremos la presión arterial en niveles bajos a normales”.
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