Navegas por internet desde tu celular y haces clic en una ventana emergente. Ya estás dentro.
Recibes un SMS de alguien que te pregunta si te llegan sus mensajes de Whatsapp y respondes al mensaje.Volviste a caer.
Te etiquetaron en una foto de Facebook que te redirigió a una web donde te pedían el número para acceder al contenido. Caíste de nuevo en la trampa.
La mayoría de las veces, quienes se suscriben a mensajes de texto Premium lo hacen de manera involuntaria.
Leer más en: BBC Mundo.