La madrugada del martes 17 de febrero, cámaras de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio, NASA, captaron el paso de una brillante «bola de fuego» por diversas localidades en Estados Unidos.
De acuerdo con la NASA, el meteorito pasó cerca de las 4:45 horas de la mañana y fue observado en Nueva York, Ohio Y Pensilvania.
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