El 2015 fue decretado por la Asamblea General de la ONU como el Año Internacional de la Luz, y en este contexto Luis Felipe Rodríguez Jorge, investigador del Centro de Radioastronomía y Astrofísica (CRA) de la UNAM, destacó la importancia del Sol, principal fuente de energía que sustenta la vida en la Tierra.
Este astro mantiene a nuestro planeta a una temperatura que lo hace habitable. En el espacio lejos de las estrellas las temperaturas son extremadamente bajas y las moléculas, por ejemplo de agua, existen sólo en forma de hielo. Sin embargo en la cercanía de una estrella alcanzan temperaturas lo suficientemente elevadas para que el agua exista en forma líquida, la cual es la clave para la existencia de la vida como la conocemos.
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