Los usuarios de teléfonos inteligentes están rechazando o desinstalando algunas aplicaciones tras un aumento de la preocupación sobre la cantidad de datos personales y privados que recolectan, según un estudio estadounidense publicado este miércoles.
El estudio del Pew Internet Project encontró que el 54% de los usuarios de móviles que se bajaron aplicaciones decidieron no instalarlas cuando se dieron cuenta de la cantidad de información personal que necesitarían compartir para poder usarla.
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