La galactosemia es una reacción adversa a la galactosa, azúcar de la leche, que se presenta en uno de cada 60 mil neonatos, informó el experto del Centro de Investigación Biomédica de Occidente (CIBO), Elías García Ortiz.
Indicó que datos como bajo peso, retraso en el crecimiento, vómito, llanto constante y gases estomacales que aparecen unos días después de que el bebé empieza a tomar leche, pueden ser indicativos de galactosemia.
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