Anders Behring Breivik, el responsable de los ataques del pasado 22 de julio en la capital noruega, Oslo, y en la isla de Utoya, utilizó, además de explosivos y armas de fuego, Facebook, videojuegos y otros recursos de internet y de tecnologías de información para preparar los ataques en los que murieron 76 personas y decenas más quedaron heridas, y para propagar sus ideas contra quienes consideraba una amenaza para la integridad europea: los islamistas y los marxistas culturales.
Ver completo en: CNN México