El futuro viaja más rápido hacia nosotros, y todo indica que al menos durante un tiempo será menos presencial y más digital, al acelerarse y profundizarse la implantación de las tecnologías que posibilitan la interacción en línea y a distancia, en reemplazo del contacto cara a cara y de los desplazamiento físicos, que se ven reducidos para evitar los contagios del coronavirus.
Leer más en: VANGUARDIA.