¿Cuántos de nosotros no tenemos un lugar especial para esos aparatos electrónicos que alguna vez nos sirvieron pero ahora son totalmente obsoletos y únicamente ocupan espacio en un rincón de nuestro hogar? O simplemente optamos por tirarlos a la basura sin saber que esto puede traer graves daños al medio ambiente y a nuestra salud.
Afortunadamente todos esos dispositivos electrónicos pueden tener una segunda oportunidad y convertirse en materia prima para volver a tener una vida útil, suena un poco nostálgico, pero es verdad; de esta manera además estamos contribuyendo al cuidado de nuestro planeta y evitamos la explotación de recursos naturales.
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