Los analistas prevén la salida del reloj de Apple con conexión 4G a finales de año.
Hasta la fecha, el uso del Apple Watch estaba directamente vinculado al iPhone; sin el móvil cerca, este reloj inteligente no tenía más funciones que dar la hora y fecha. De hecho, Apple supo tejer minuciosamente esta estrategia con el objeto de crear más vínculos con el usuario de su ecosistema: si uno estaba contento con el iPhone, era muy probable que acabara comprando un reloj, y viceversa. Establecido este vínculo, resultaría difícil de romper y abandonar la plataforma hacia otro modelo de móvil o reloj. El reloj lleva ya más de dos años en el mercado y el fabricante estaría preparando un salto de calado en su próximo modelo: lograr que el reloj no necesitara un iPhone cerca para operar.
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