Limitado a nivel físico, pero con un espíritu brillante que trabaja a toda marcha, Stephen Hawking es uno de los científicos más grandes de todos los tiempos. El 8 de enero cumple 75 años a pesar de los pronósticos médicos, según los cuales ya debería estar muerto hace décadas. Recientemente fue internado una vez más, en un hospital de Roma, luego de un encuentro con el Papa.
Hawking está en silla de ruedas y, debido a una traqueotomía, no puede hablar desde hace unos 30 años. Sin embargo, eso no le impide viajar alrededor de todo el mundo, siempre acompañado por un grupo de personas entre las que se cuentan sus enfermeras.
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