Los astronautas residentes en la Estación Espacial Internacional (EEI) empezaron esta semana a degustar su propia lechuga, una hortaliza fresca y crujiente que sembraron y cosecharon en su jardín espacial.
Esto es posible gracias al llamado «Veg-01» o «Veggie», un sistema con microgravedad que funciona como huerto.
Leer noticia completa en: El Universal.