Durante la Guerra de Vietnam, los mexicanos que simpatizaban con posturas políticas progresistas manifestaron de maneras distintas su apoyo a la lucha del pueblo vietnamita contra la intervención estadounidense. Desde los distintos rincones de la izquierda, intelectuales, organismos y grupos estudiantiles protestaron ante la Embajada de los Estados Unidos y organizaron actos políticos en solidaridad con el país asiático.
La Voz de México, el periódico de los comunistas, reprodujo notas pro soviéticas, información proveniente del Kominform, editoriales adoctrinadores contra el imperialismo yanqui, lista de libros para el buen militante y reportajes de denuncia escritos por Mario Gil o Edmundo Jardón donde se aplaudió la resistencia del Vietcong y se recriminó la agresión estadounidense. La intención del rotativo era generar una postura favorable a la lucha del Vietnam del Norte, incentivar los apoyos y la solidaridad para el proyecto del Vietcong y minar la propaganda del gobierno estadounidense.
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