La falta de acceso a agua para beber una de las causas principales de la obesidad, por lo que sin duda un paso histórico por la salud y los derechos de los niños en México será el que cuenten con bebederos o dispensadores de agua todas las escuelas.
Después de que la Cámara de Diputados avaló los cambios realizados por el Senado para que todas las escuelas de educación básica y media básica, tengan bebederos de agua potable, las organizaciones de la Alianza por la Salud Alimentaria (ASA) señalaron que el siguiente paso es lograr “el acceso libre al agua para beber en edificios y espacios públicos así como centros comerciales a fin de disminuir consumo de bebidas azucaradas y reducir la cifra que 7 de cada 10 mexicanos padezcan obesidad”.
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