La antorcha olímpica ha recorrido prácticamente todos los lugares del planeta e incluso recientemente ha llegado a la Estación Espacial Internacional (apagada, eso sí). También son innumerables los personajes que han tenido el privilegio de llevarla durante alguna etapa de su periplo a lo largo del país anfitrión.
No es sencillo, pues, resultar original cuando se trata de sorprender con la llama olímpica así que, además del viaje espacial de la antorcha, a los organizadores rusos de los próximos Juegos Olímpicos de Invierno, que se celebrarán en Sochi del 7 al 23 de febrero, se les ha ocurrido otra idea, en este caso bastante polémica: entrenar a un delfín nariz de botella para que participe en el tradicional relevo de la antorcha.
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