Para este año fiscal (abril 2013-marzo 2014), el creador de Mario y Pikachu espera una pérdida neta de 190 millones de euros, muy lejos de los 55.000 millones de beneficios esperados con anterioridad.
En 2012-2013 registró un pequeño beneficio aunque mantuvo su déficit operativo y parece que lo repetirá este año. En cinco años, sus ingresos por ventas se han dividido por cuatro.
En 2008-2009, el grupo, entonces en la cumbre de su gloria amplificada por la debilidad del yen, registraba un beneficio de explotación cercano al volumen de negocios que prevé para este año.
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