Durante décadas, libros y películas han reflejado la ambición del ser humano de crear robots capaces de realizar sus labores; esto podría estar cerca de la realidad y una prueba de ello es el androide Geminoid DK, que es el doble de un científico.
Hecho a semejanza del investigador danés Henrik Scharfe, el androide, con piel a base de un componente de silicona y cabello real, es capaz de imitar los gestos de su “doble”, decir algunas frases y responder a estímulos como la sonrisa.
Leer noticia completa en: Vanguardia.