La compañía alemana BMW diseñó y tiene en etapa de prueba un centenar y medio de vehículos eléctricos cuyo chasis es fabricado completamente con fibra de carbón en lugar del tradicional acero empleado por las automotrices y sin ninguna soldadura, pues todos sus componentes van pegados.
El nuevo auto eléctrico, llamado BMW i3, fue construido en Leipzig, Alemania y está sujeto a prueba en ciudades globales alrededor del mundo, como Nueva York, Tokio, Beijing y la ciudad de México, explicó a MILENIO el responsable de comunicación de la empresa, Jochen Müller.
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