El desarrollo saludable de los niños puede ser afectado por el estrés, con efectos negativos en la edad adulta, con enfermedades como cáncer, asma y depresión.
Un estudio, difundido esta semana por la Academia Estadunidense de Pediatría (AAP), define la existencia de tres tipos de respuestas al estrés -positiva, tolerable y tóxica-, como efectos de los sistemas del cuerpo a la reacción a un evento estresante o la experiencia misma.
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