El insecto conocido, entre otros nombres populares, como efímera, y que, en su forma adulta, vive apenas un día, ya es de por sí extraordinario debido a la brevedad de su vida adulta. Ahora se han obtenido imágenes espectaculares mediante escaneos de tomografía computerizada de un trozo de ámbar que revelan el primer caso conocido de un animal que usa a una efímera adulta para transportarse.
Los autores del hallazgo, de la Universidad de Manchester en el Reino Unido, consideran que este «autoestopista» de 16 millones de años de antigüedad muy probablemente demuestre una actividad que ocurre en la actualidad pero que nunca había sido registrada.
Leer nota completa en: NCYT