La mayoría de padres fumadores expone a sus hijos al humo del tabaco en los automóviles, lo que contribuye a un mayor riesgo de infecciones respiratorias, cáncer e incluso la muerte, asegura un estudio pediátrico.
El análisis difundido por la Academia Estadunidense de Pediatría destaca que no existe un nivel seguro de exposición al humo de tabaco, pero los padres que fuman pueden ayudar a proteger a sus hijos siguiendo una estricta política de «vehículo libre de humo».
Un grupo de investigadores encabezado por Emara Nabi-Burza, del Hospital General para Niños de Massachusetts, entrevistó a 981 padres fumadores, de los cuáles 817, el 83 por ciento, tenía un automóvil y de ellos 795 aplicaba ciertas reglas respecto a fumar dentro del coche.
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