La constante actualización de dispositivos electrónicos nos permite contar con cada vez más comodidades y funcionalidades, sin embargo, el aceleramiento en la sustitución también genera un serio problema de contaminación que no es considerado por muchos mexicanos, pues de acuerdo con un estudio realizado por la Universidad Veracruzana únicamente 43% de los usuarios sabe que los aparatos contienen materiales dañinos para el entorno y las personas.
Se estima que nuestro país genera unas 180 mil toneladas de basura electrónica por año, equivalente a llenar cinco veces el Estadio Azteca, principalmente por televisiones, teléfonos celulares y computadoras, de los cuales sólo se recicla 1%.
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