Una ex fábrica de cinturones de las afueras de Estambul, llamada «Sina Afra» y sus 500 empleados, construyen lo que será la primera compañía de comercio electrónico del país, de 1,000 millones de dólares. También está Markafoni, la segunda red de compras de acceso exclusivo a sus miembros más visitada del mundo, que creció casi 60% en Turquía y ha atraído inversiones de eBay, Amazon.com, Kleiner Perkins CaufieldByers, Naspers y Tiger Global. Y sobre todo el sitio Trendyol.com alcanzó los 100 millones de dólares de ganancias menos de 18 meses después de ingresar a la web.
¿Qué tienen de común estas historias? Representan a una generación de jóvenes emprendedores turcos que regresana su país, tras estudiar en el extranjero, para liderar una transformación de su país.
Ver completo en: El Financiero