La decisión de la trasnacional petrolera española Repsol de invertir, con sus socios British Gas-PAE, mil 400 millones de dólares en Bolivia hasta 2014, significa «un punto de inflexión para retomar la senda del desarrollo del sector hidrocarburífero en este país», luego de un periodo de «innegable incertidumbre para los operadores», informó Jorge Ciacciarelli, presidente de Repsol Bolivia. En entrevista publicada en la revista Petróleo&Gas de la Cámara Boliviana de Hidrocarburos y Energía, el ingeniero químico argentino destacó que a partir de esa decisión de Repsol, «otras empresas en el sector comenzaron á percibir que valía la pena quedarse e invertir en este país».
Agregó que Margarita, por el nivel de reservas, es un megacampo de Bolivia que junto con otros como San Antonio, San Alberto e Itaú, constituirá la base del suministro de gas para el país y permitirá cumplir con los compromisos de exportación asumidos por Bolivia con Brasil, y especialmente con Argentina. Explicó que la primera fase de la inversión que consiste en el montaje de un nuevo «tren» de tratamiento (planta), las líneas de transporte necesarias y la terminación de dos pozos ya perforados, se encuentra con un avance importante. Ya se firmaron los contratos para la construcción de una planta de tratamiento de gas con la empresa Técnicas Reunidas, y otro para la ingeniería, aprovisionamiento y montaje de las líneas de recolección y evacuación para Margarita y Huacaya, con la empresa Techint.
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